Todos podemos y debemos contribuir a hacer de Internet un espacio positivo para niños y adolescentes.
Los niños y jóvenes pueden ayudar siendo respetuosos con los demás, protegiendo su reputación y la del resto de personas en la Red y buscando oportunidades positivas para crear, participar y compartir a través de Internet.
Los padres y tutores pueden motivar e inculcar a sus hijos un empleo responsable, respetuoso, crítico y creativo de la tecnología, estableciendo un diálogo abierto con sus vástagos, educándolos en un uso seguro y positivo de la tecnología o actuando como referentes de comportamiento digital.
Los profesores, educadores y trabajadores sociales pueden contribuir capacitando a sus alumnos y estudiantes con competencias informáticas y fomentando el pensamiento crítico, lo que les permitirá navegar mejor por Internet.
Las empresas pueden colaborar en la creación de una Internet mejor creando contenido positivo y promoviendo servicios seguros en la Red. Además, pueden proporcionar consejos sobre el empleo seguro de Internet, herramientas de seguridad que resulten fáciles de utilizar y un acceso rápido a ayuda en caso de que algo no vaya bien.
Los responsables y dirigentes políticos deben asegurar que los planes educativos incluyan formación en materia de seguridad en Internet, información adecuada y fuentes de apoyo o que las empresas se comprometan a la autorregulación de sus contenidos y servicios. Además, deben garantizar la seguridad y el bienestar de niños y jóvenes mediante la creación de estrategias reales de protección infantil en Internet.
Fuente: Eroski Consumer